homenaje a jade goody

by parapo

véndelo todo, dale lo que piden. es ingenuo pensar que los que te odian son personas diferentes de los que compran tu carroña. espero la fotografía de tu cremación, el tuetano fundido filtrándose por las grietas de tus huesos quemados, el olor a barbacoa de la incineradora. y espero que tus hijos sigan tu ejemplo y lo vendan todo, los dientes de leche bajo la almohada, la primera regla, las violaciones y la cocaína. ellos los estarán esperando, con su dinero y su odio. es un buen negocio.

un estructura necesita de contradicciones para sostenerse. un precario equilibrio de cargas y fuerzas, de opuestos. el puño que te golpea termina abriéndose, ofreciéndote un fajo de billetes. deja pues que te masacren. el dolor que sientes lo inventaron ellos, porque les aterroriza que hayas aceptado el trato. todo el peso del acuerdo reposa sobre tus hombros, eres tú la que decide cuánto y por qué: ellos solo tienen dinero. y rezan para que no aguantes, para que cedas a su moral, a su condescendencia. 

tú ya estás muerta y no te incumbe, pero el trato tiene una parte amarga: ellos no olvidan. terminarán haciendo pagar a alguien por tanto atrevimiento.